importancia del dibujo y del destino del color. Especializado en diseño gráfico, decide dedicarse a la pintura de la mano de una destacada generación de artistas sevillanos a la que pertenece y que tantas satisfacciones está dando a la pintura nacional actual.

La arquitectura ocupa un papel protagonista en toda su creación. A través de juegos de luces y sombras representados con campos de colores planos, intensos y fuertemente definidos, delimita y materializa formas arquitectónicas. Para Gil, el arte es emoción y su formación como diseñador gráfico determina su lenguaje. Viendo sus cuadros se puede pensar que Mondrian es quien le inspira, pero el artista dice que es Matisse por el color, o Hockney y Hooper por la luz.

Trabaja en acrílico por la limpieza del material, buscando superficies muy planas donde la pincelada sea imperceptible. Utiliza una tela primigenia de la que se elimina cualquier resalte, usa el rodillo y mezcla las pinturas evitando cualquier grumo. Parte de un proceso previo con el ordenador, sobre el que documenta cualquier proyecto para más tarde seleccionar imágenes y realizar pruebas de color, consiguiendo un resultado final muy parecido al boceto digital.

Ha obtenido multitud de premios como el BMW de pintura, IX Certamen Nacional de Pintura del Parlamento de la Rioja, el XXXIII Premio Internacional de Pintura Eugenio Hermoso o VIII Certamen Internacional Fundación Barceló. Su obra se encuentra en varios museos y colecciones tanto públicas como privadas, entre otros Colección CAC Málaga, Colección Ayuntamiento de Utrera, Colección de la Confederación de Empresarios de Cádiz, o la Consejería de obras públicas de la Junta de Andalucía.